martes, 22 de septiembre de 2009

Método para aprender a ir al baño

He encontrado este método que me parece bastante bueno, y que tal vez pueda ayudaros a enseñar a vuestros hijos e hijas que la caca no se hace encima, como se lo hemos repetido hasta la saciedad. Ahí va...

Método para hacer que haga la caca en el váter

Pasea casualmente por delante de una floristería donde pueda ver bonitas flores, pero no le ofrezcas nada. Luego, en casa, explícale que tienes un buen plan que tendrá premio. Reconócele que no lo habías hecho bien hasta ahora (aprende a pedir perdón). Mamá no se va a volver a enfadar, no va a gritar y no lo va a castigar para convencerlo de que hacer caquita es una cosa normal aunque cuesta aprender. Proponle un premio, una linda plantita que podrá elegir él mismo en la floristería (lógicamente los "límites" de la plantita los pones tú). No le ofrezcas juguetes nuevos, caramelos ni otros premios habituales. Dibujad en un gran cartel (esto es muy importante, ya que le hará tomar conciencia del acuerdo al que llegueis),el premio y 5 casillas donde marcareis los logros. Este premio deberá conseguirse a plazos (pues con un solo día no se aprende). Puede pegar gomets o marcarlo con un rotulador, como él prefiera. Hasta aquí, el estímulo es suficientemente positivo como para que tu hijo sienta ganas de participar.
Elige un momento del día que siempre puedas disponer para él y con un poco de intimidad (no deben entrar otros miembros de la familia pues distraen en exceso). Habitualmente será después de cenar porque no tendrás prisa para marcharte pero siempre debe ser el mismo momento para crear una rutina. Entonces lo acompañas al lavabo donde elegirá la bacinilla o el váter de adultos con o sin adaptador. Explícale que se sentará solo 10 minutos y pondrás en marcha un avisador (reloj de cocina o despertador). Para conseguir que esté sentado ese tiempo, proponle que te explique lo que ha hecho ese día (en casa o en el jardín) o explícale un cuento. Evidentemente es el momento más delicado pero recuérdale que el reloj es el que marca el tiempo. No le digas que la tarea es fácil pero tú se lo vas a enseñar con paciencia. Es evidente que el día que lo consiga:
Se lo vas a celebrar con un gran abrazo.
Podéis jugar a despedir alegremente a la familia caca (papá y mamá caca, caquito y caquita, según salga cada día) que tienen un montón de cosas que hacer y tienen prisa.
Cántale siempre "después de hacer caquita, lavarse las manitas" mientras se las lava con jabón.
Iréis corriendo a pegar un gomet en el cartel de su habitación.
Un consejo: no lo cuentes a los de fuera de casa en su presencia, es algo íntimo. Si quiere, que lo cuente él mismo o que enseñe el cartel completo.
La continuidad también puede ser difícil por lo que puedes ofrecerle nuevos premios pero que costarán más logros: 10 por una visita al zoo, luego 15 por una tarde en una ludoteca y 20 por cualquier otra cosa que sea realmente estimulante. Así hasta que veas que el hábito está instaurado y puedas cambiarlo por un buen abrazo y una sesión de cosquillas antes de acostarse.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Guía de juguetes para niños/as de 1 a 3 años

0 a 1 año:

Aprender a caminar y afianzar el equilibrio:

Este aprendizaje no es tarea fácil y para ayudar tenemos en el mercado andadores,arrastres o juguetes con movimiento que estimulan el desplazamiento. Ejercitando la marcha y el equilibrio, el bebé llegará a controlar automáticamente su centro de gravedad.

Experimentar con nuevos movimientos en el espacio:
Rodar por el suelo, jugar a pillar, a salvar obstáculos, o jugar con arrastres, correpasillos,pelotas u otros juguetes que estimulen el movimiento, le ayudarán a coordinar su motricidad y le divertirán mucho.

Asimilar el concepto de direccionalidad:
Para conseguirlo nos pueden ayudar construcciones sencillas y juguetes para poner en fila (horizontalidad) o apilar (verticalidad). Con estas actividades se empiezan a comprender los conceptos de orden y secuencia. Familiarizarse con su cuerpo, su personalidad y su propia imagen.Es importante comprender la diferencia "yo"-"no yo". Son fundamentales los juegos sobre el esquema corporal, que incorporen espejos o aquellos que generan sensaciones diversas.

Aprender algunos colores:
Son especialmente interesantes los juguetes de colores vivos; con ellos podemos proponerle juegos de agrupar o buscar por colores. El rojo, el azul, el amarillo y el verde suelen ser los primeros en aprenderse.

Mejorar su coordinación de movimientos en manos y dedos:
Con actividades como ensartar, pintar, deslizar, encajar, manejar, etc. Poco a poco hay que conseguir la coordinación ojo-mano, además de segmentar los movimientos de los dedos.

Diferenciar formas y tamaños:
Hemos de proporcionarle juguetes de diferentes formas y tamaños: cubos para meter unos dentro de otros, figuras geométricas, etc. Además, es importante hablar con los niños/as, sobre las formas, los tamaños y sus equivalencias, invitándoles a razonar sobre esto.Aprender a compartir y practicar los conceptos de dar y recibir.Son adecuadas actividades y juegos que inviten a repartir, pedir o entregar objetos.Le ayudaremos proporcionándole juguetes, situaciones u otros estímulos que le permitan:

1 a 2 años:

En estos primeros años pasa de ser bebé a niño/a y, para esta transformación, ha de superar importantes cambios y aprendizajes en todas las facetas de su desarrollo: lenguaje, razonamiento, afectividad,socialización y coordinación de movimientos. Durante los primeros tres años de vida, el desarrollo cerebral y la capacidad de aprendizaje son mucho mayores que en otras etapas. Es fundamental, por lo tanto,además de proporcionarle juguetes variados, que dediquemos mucho tiempo a interactuar con él /ella a través de distintos tipos de juegos.

Estimular la motricidad fina:

Los juguetes manipulativos y muchas actividades cotidianas pueden ayudarle a controlar y mejorar su movilidad en manos y dedos.Favorecer el sentido del tacto.Hay que dejarle tocar y experimentar con las texturas: elementos de la naturaleza (arena,agua, nieve, piedras, hojas), cosas frías y calientes. Hay muy buenos juguetes para estimular el tacto, y si no nos podemos ayudar de objetos de la vida cotidiana. Es interesante percibir texturas también con los pies o con otras partes del cuerpo.Desarrollar su comprensión del entorno social.Son muy adecuados los juguetes que incluyen personajes, albumes de fotos o dibujos de personas,y los juegos o actividades para identificar y conocer las personas de su entorno,nombrarlas, relacionarlas, etc.
Comprender y expresar emociones.

Hay que enseñarle a distinguir estados de ánimo. En el mercado hay muchos juegos para trabajar estos conceptos.Fomentar el interés por la lectoescritura y la expresión gráfica.Para fomentarlo es importante leerle cuentos, nombrarle objetos, enseñarle palabras escritas, hablarle de las letras, invitarle a ejercitar el trazo y alabar sus grafismos. Pizarras,juegos sencillos de colorear o tener los primeros contactos con las letras son adecuados para ello.

2 a 3 años

Experimentar con la capacidad de los objeto:
Muchos juguetes pueden ayudarle a comprender conceptos como lleno-vacío, mayor-menor,cabe-no cabe.Ejercitar el soplo, las vocalizaciones y la pronunciación.Para llevarlo a cabo podemos encontrar muchos juguetes que invitan a verbalizar, además de todos los juegos simbólicos que desarrollan el lenguaje. Ejercitar el soplo a través del juego puede ser muy divertido, y se ha demostrado que las habilidades mejoradas con el soplo se relacionan directamente con las necesarias para una pronunciación adecuada, por ejemplo nos podemos ayudar de molinillos o botes para hacer pompas de jabón.Para incrementar el vocabulario y la capacidad de expresión y comprensión es importante hablarle correctamente, no debemos abusar de los diminutivos ni usar palabras infantiles. Son muy adecuados los juegos relacionados con la búsqueda o el nombramiento de objetos, o aquellos que estimulen la comunicación.

Ampliar sus habilidades comunicativas.
Es fundamental hablarle mucho, reforzar sus progresos y explicarle nuevas palabras.Los cuentos y los juguetes pueden ser un buen aliado.

Fomentar tareas motrices:
El niño/a ha de mejorar el control y la coordinación de sus movimientos corporales.Debe ser consciente de su propia fuerza y aprender a controlarla. Algunos juegos de movimiento adecuados para esta edad son triciclos, globos y pelotas, entre otros.Superar retos y etapas de cambio en su desarrollo.En esta etapa se producen cambios difíciles como aceptar el colegio, dejar de usar el chupete o el pañal, etc. En estos procesos algunos juguetes de apego o simbolización pueden ayudarnos.

Ayudarle a controlar rabietas.

Sobre los 2 años muchos niños/as pasan por una fase de negación con frecuentes rabietas. Es una etapa normal que les ayuda a autoafirmarse como personas si se supera correctamente, si no caemos en la sobreprotección o les trasmitimos mensajes equivocados a cerca de su comportamiento. Algunos juguetes y cuentos pueden ayudar a reforzar conductas positivas y ejemplificar o representar situaciones de conflicto.

Discriminar colores, formas y tamaños:
Estos pequeños aprendizajes le ayudarán a desarrollar cambios cualitativos en su estructura mental y muchos juguetes o materales cotidianos pueden ayudar a ejercitarlos.

Iniciarse en los abroches:
Ha de empezar por los más sencillos (velcros, cremalleras) y, poco a poco, ir aumentandola complejidad, hasta los botones o hebillas. Hay juguetes específicos para estimular estos aprendizajes y su dominio incrementará la autonomía y la autoestima, aunque que mejor forma de aprender esto que con su propia ropa, es hora de que se vistan solos, nosotros les ayudaremos, pero siempre sentando las bases para que ellos aumenten su autonomía un poco más cada dia.
Ejercitar su capacidad de simbolizar:
Imitando se ejercita la imaginación, se exterioriza la percepción de la realidad y se aprenden todo tipo de acciones. Alrededor de los 3 años de edad se consolida esta capacidad y son fundamentales las muñecas, vehículos, supermercados y todos aquellos juegos que reproducen el entorno familiar y social.

Aprender a compartir:

Muchas actividades lúdicas, con la ayuda del adulto, pueden ayudar a hacer comprender al niño/a, la necesidad de compartir. Los frecuentes conflictos sobre la posesión de los juguetes pueden ser una oportunidad para educarles respecto a estos temas. También nos ayudarán a ello, juegos sencillos que inviten a repartir o intercambiar objetos.Sentirse autosuficiente por un rato.

El niño/a durante el juego (al contrario que en la "vida real") experimenta un sentimiento de control sobre los objetos y se siente dueño de la situación. Es importante proporcionarle juguetes y materiales manejables, que pueda utilizar sin ayuda y que le permitan intentar las cosas por si mismo.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Cómo fomentar hábitos de vida saludables en casa

Establecer un lugar, un tiempo y un guía es necesario para que el pequeño entienda cuáles son los elementos que le ayudarán a seguir ciertas rutinas diarias.
Día a día, un niño necesita dormir y comer adecuadamente, lavarse los dientes, estudiar, jugar y realizar otras actividades que le generan hábitos y comportamientos.
Sin embargo, algunos pequeños tienen dificultades para llevar a cabo rutinas diarias de cada actividad o no tienen un ambiente adecuado para realizarlas.
Contrario a lo que muchos padres creen, nunca es tarde para corregir estas costumbres. A medida que pasa el tiempo se vuelve más difícil, pues los pequeños crecen y se resisten a formarse. Sin embargo, del acompañamiento, la paciencia, la cooperación, la claridad y la ayuda depende el buen aprendizaje.
“Adquirir hábitos es uno de los principales logros que se ponen en práctica durante toda la infancia, ya que gracias a ellos los niños aprenden a ser organizados, responsables y a desempeñar las tareas que a diario afrontan. Durante la niñez, estos comportamientos también generan seguridad y confianza”, asegura la psicóloga infantil Paula Bernal.
Claves de enseñanza
La niñez es el periodo clave para enseñar costumbres sanas. Sin embargo, no todos los pequeños tienen el mismo temperamento ni el mismo método de crianza. Siempre habrá necesidades y actitudes por corregir.
Los niños necesitan que los padres participen de la acción que ellos realizan para que, además de seguir su ejemplo, interioricen el comportamiento y lo apropien.
“Desde que un bebé nace, los papás le dicen al niño en qué momento se hacen ciertas actividades; están moldeando comportamientos para que el pequeño más adelante pueda actuar solo y no tenga que desgastarse tratando de descubrir cómo es que se hace algo”, explica la psicóloga Juana Morales, especialista en desarrollo y crianza.
Hay que establecer acuerdos sobre cómo se va a hacer la rutina. Los hábitos se construyen a través de un tiempo (hora, minutos, etc.), un espacio y de unas personas asociadas (quién va a guiar la acción).
Estos elementos deben ser coherentes y continuos para crear un comportamiento claro. En este aspecto, no se debe caer en la extrema rigidez, ni en la total flexibilidad.
Además de enseñarle, hay que elogiar al pequeño por sus actividades y sus logros. No hay que compararlo con otra persona ni castigarlo o amenazarlo.
Según Morales, “debido al proceso de desarrollo, los niños van a poner resistencia a estas rutinas porque a veces hay cosas más divertidas por hacer. Parte de la tarea de los papás es parar, repetir, darle tiempo y espacio; asimismo, establecer formas y lugares comunes para hacerlo diariamente”.
En la mesa
Gonzalo Franco, pediatra y director del Centro Colombiano de Nutrición Integral CECNI da algunos consejos sobre cómo fomentar hábitos de alimentación adecuados:Los primeros 18 meses son básicos en el aprendizaje de comer; por eso durante los 6 meses iniciales, se debe fomentar la succión para lograr mayor cantidad de leche materna. Después de los 4, iniciar el empleo de cucharita con alimentos líquidos o en puré de frutas o verduras. Entre los 6 y 9, probar diferentes sabores como ácido, dulce, amargo suministrando sopas licuada con carne o crema s de verduras. Entre los 9 y 12 meses, hay que realizar la toma de los alimentos en trozos para aprender la consistencia. Después del año, comer en familia, sin televisión, en el momento de la comida.No hay que obligarlos a comer, crear ritos para que reciba el alimento ni castigarlos porque no comen. La hora de la comida debe ser un momento agradable.

En la cama
Una rutina de sueño es indispensable para que el menor pueda descansar y organizarse a la hora de dormir. Alejandra Velasco, experta en enseñanza autora del libro ‘El sueño del niño’ y asesora de la miniserie 'Dulces sueños', aconseja:- Empezar la rutina una hora antes de ir a la cama. Un niño tiene que dormirse, a más tardar, antes de las 8:30 p.m.- El niño debe conciliar el sueño en su propia cama, no en la de sus padres.- Procurar que las cenas no sea tan ligeras y que tampoco contengan dulce. - Ir al baño, después ponerse la pijama y dirigirse al cuarto. Es importante el contacto con él, antes de dormir. Pueden hablar, rezar, leer, hacer masajes y finalmente dar un abrazo.- No permitir que el pequeño se duerma viendo televisión. La experta en enseñanza enfatiza en que “el niño que hoy no duerme, va a ser el adulto del mañana que sufre de insomnio, el niño que va a tener problemas neurológicos y que le va a faltar atención en su aprendizaje”.

En el estudio
La psicóloga infantil Paula Bernal da algunas claves para promover el hábito de estudiar. Tenga en cuenta que estas estrategias son adecuadas dependiendo de la edad, puede empezar con las más sencillas y continúa con las más complejas.
- Establezca límites en la cantidad de televisión que su hijo ve.
- Tenga una actitud positiva frente al colegio.
- Haga un buen uso de los computadores.
- Asegúrese de que su hijo no deje las tareas para último momento.
- Mantenga utensilios escolares al día para que el niño pueda elaborar sus tareas adecuadamente.
- Establezca de antemano un lugar y horario específicos de estudio.
- En cuanto al horario y teniendo en cuenta las cargas académicas, mantenga organización para que haya un tiempo de descanso justo. Esto da espacio para que el niño no se sobrecargue.
- Para la organización, puede utilizar una agenda de tareas para desarrollar tiempos y fechas de entrega de trabajos.
- Promueva el desarrollo de la lectoescritura, ya sea como ejemplo leyendo el periódico, libros o entretenimiento. Aprenderá que las personas leemos porque es importante y útil en el diario vivir.

En la salud oral
Los hábitos de higiene oral empiezan por la madre; cuando está embarazada, debe seguir una rutina de limpieza, para que su hijo no tenga problemas futuros. Por otra parte, es importante que acompañe a su hijo, al igual que su padre, en este proceso, pues desde los seis meses deben limpiar las encías con un algodón limpio y húmedo. Cuando salen los dientes, hay que utilizar un cepillo de cerdas de nylon. Así con el resto de la dentadura que vaya apareciendo, sin descuidar el aseo de las encías. Según Francisco Hernández, presidente de la Academia de Odontología Pediátrica, es necesario enseñar el hábito de la higiene, pues un niño actúa según el cuidado oral que tengan sus padres; coordinar el cepillado de los pequeños para que cuando tengan una motricidad fina desarrollada, pueda hacerlo por sí mismos. Finalmente, se aconseja que el niño tenga un cepillo propio, y los padres uno diferente para que repasen la limpieza de los hijos.
En el hogar
Los mejores juegos, los mejores aprendizajes, no se encuentran en jugueterias, si no que están en nuestro entorno. Lo primero que debe conocer el niño en sus primeros años es su entorno inmediato, pero no solo basta con esto si no que tiene que formar parte de él, y para ello es imprescindibl que asuma tareas de la vida cotidiana, como hacer la comida o su desayuno ( untar el pan, echar la leche, poner la mesa,etc.), limpiar ( barrer, fregar, quitar el polvo, limpiar cristales, tender la ropa,fregar los platos,lavar ropa,etc.). No debemos caer en la falsa compasión, ya que son actividades que les divierten muchísimo, perfeccionan su movimientos y les hace más diestros, y lo que es más importante si cabe, refuerza su autoestima y autoconcepto, ya que les da una misión, les convierte en protagonistas de su vida.

Cómo fomentar la autoestima en los niños y niñas

Durante los primeros cuatro años, el niño va moldeando su propia personalidad. Por eso, el papel de los padres en esta etapa es fundamental para conseguir que nuestros hijos consigan tener una autoestima positiva, ser seguros de sí mismos, independientes y libres.
Para ello, una de las claves de la educación es saber fomentar su autonomía que le permita explorar, conocer e investigar el mundo que le rodea, algo indispensable para su crecimiento personal.
Uno de los consejos de los expertos es no tener al niño en una pequeña cajita de cristal por miedo a que se manche o pueda golpearse. Es decir, no sobreprotegerlo. Por el contrario, debemos estimular a nuestros hijos para que desarrollen sus necesidades innatas de explorar con la confianza de que mamá y papá estarán siempre para acompañarle.
Una de las primeras cosas que debemos procurar es proporcionarle un ambiente familiar cálido, que le brinde seguridad para que el niño sienta que pisa sobre seguro.
Cuando el bebé comienza a moverse por sus propios medios gateando y más tarde andando por toda la casa, tenemos que procurar que tenga plena libertad para la exploración. Debemos quitar o proteger cualquier potencial peligro de su camino (enchufes, escaleras, muebles con punta, objetos peligrosos, etc) para que pueda sentirse cómodo y campar a sus anchas por el terreno.
Así evitaremos estar todo el tiempo pendientes de que se haga daño, dejándole que investigue y hasta que transgreda ciertas normas, pero siempre con seguridad. No debemos olvidar que el hogar debe ser habitable para todos, no solo para los adultos.
Es importante también felicitarle cuando consigue pequeños logros. Nuestra aprobación y nuestros elogios son pequeñas recompensas del día a día que les motivan a seguir adelante.También es importante proponerle pequeños retos para que sea valiente y avance siempre hacia delante.
Cuando jugamos con ellos, no debemos hacer las cosas por ellos, sino con ellos. La complicidad que se establece al acompañarlos en el juego ayuda a reforzar su autonomía, al igual que jugar con otros niños de su edad.
Cuando juguéis, lo mismo que en las situaciones cotidianas, déjale que tome pequeñas decisiones con el fin de estimular su propia capacidad para escoger y decidir.
También es importante ser sincero con ellos, deben confiar en nosotros, y debemos procurar decirles siempre la verdad, por ejemplo, a la hora de ir al médico, o casa de alguien que no quera, o al cole (si no le gusta),no debemos engañarlo, para que se de cuenta cuando ya esté allí, los niños deben aprender a asumir distintas situaciones, pero si les mentimos no les dejamos que crezcan, ya que no les damos opción, y los situamos en una situación límite de la que es muy difícil aprender algo.

Las Metas Equivocadas del Niño y su Solución

Cuando un niño no se siente tomado en cuenta, cuando no está muy seguro si sus padres lo quieren o no, él va a tratar, a través de distintas vías, de acaparar la atención de sus padres y de recibir una respuesta por parte de ellos. Según Rudolf Dreikurs, este niño desarrollará conductas negativas basadas en metas equivocadas.
En esta página examinaremos lo que dice Dreikurs sobre algunas de estas conductas basadas en metas equivocadas, y tomaremos de él lo que nos sea útil. También examinaremos como reaccionar frente a dichas conductas para eliminarlas.

1. Conducta: Constante búsqueda de atención:

Meta equivocada del niño: "Tienen que fijarse en mí, solo valgo si me prestan atención."
Esta conducta aparece más que todo entre los 2 y los 5 años. En esta situación el niño piensa que él es importante para sus padres solo cuando estos le prestan atención.
Para poder eliminar esta constante búsqueda de atención hay que primeramente entenderla dentro del contexto de la convivencia familiar. El niño que necesita y busca constantemente atención de sus padres es un niño que no ha aprendido todavía jugar o estar solo aunque sea por cortos períodos de tiempo; es un niño que necesita sentir la mirada y la atención de la madre o del padre o de ambos puesta en él, y se angustia si no tiene esta atención. El no se ha dado cuenta todavía de que ya no es el centro de atención como cuando era bebé y que, más bien, está empezando a formar parte de un grupo: la familia.
La noción de pertenencia a un grupo es una noción que un niño adquiere paulatinamente. Poco a poco él va aprendiendo que cada uno tiene un ROL y un LUGAR en la familia; que cada uno HACE algo y se ENCARGA de algo, por ejemplo, Mamá y Papá cocinan, Mamá recoge cosas en la casa, Papá recoge cosas en el garaje, etc. El descubre también la noción de respeto hacia los demás, primero el respeto por las cosas de los demás ("esto es de Papi.", "esto es del hermano mayor", etc.), y luego el respeto por el tiempo de los demás ( "Papi está leyendo el periódico.", "Mami está revisando algo en el Internet."). Cuando el niño empieza a jugar solo, o a guardar sus juguetes, sus padres le dicen cosas como: "¡Que bien juegas solo!", "¡Gracias por guardar tus juguetes!", y refuerzan sus logros con elogios. Paulatinamente él se va dando cuenta que las cosas que cada uno hace son importantes y si se dejan de hacer, hay malestar en el grupo, algunos se quejan, uno le grita al otro, etc..... Descubre también que, además de los momentos en los cuales la gente de su familia quiere estar sola, hay otros momentos en los cuales se unen para compartir, jugar, disfrutar, opinar, discutir, etc. Poco a poco el descubre como "funciona" su grupo, su familia y, con la ayuda y refuerzo de sus padres, aprende a participar, a cooperar y a respetar a los demás.
Pero si alguno de Uds. tienen uno de sus hijos que necesita y busca su atención constantemente, y que aún no ha aprendido a respetar las necesidades de los otros, ¿qué pueden hacer? Primero tómense unos momentos a solas o juntos (padre y madre) para examinar la situación. ¿Es una conducta que está siendo dirigida hacia la madre, hacia el padre, o hacia los dos alternativamente? ¿Qué piensan de su hijo?, sinceramente. ¿Cómo le están trasmitiendo que lo quieren, que están orgullosos de él, que tienen confianza en él? ¿Quieren en realidad corregir esta conducta?
¿Por qué es importante corregir o eliminar esta conducta? Porqué hay que ayudar al niño a desarrollar confianza en si mismo y al mismo tiempo enseñarle a respetar y cooperar con las necesidades de los otros en la familia. Si los padres no ayudan a eliminar esta conducta y responden a las demandas del niño y siempre le prestan atención - están irrespetando a su hijo y a su necesidad de aprender como funcionar en grupo.
Si están dispuestos a corregir esta constante búsqueda de atención les voy a sugerir el siguiente ejercicio. Si Ud. piensa que Ud. normalmente le transmite a su hijo amor y confianza en si mismo, haga lo siguiente - en el momento en que Ud. se ocupa haciendo algo de su interés (leer un libro o una revista, pasar un rato revisando el Internet, estudiar, etc.) y su hijo exige su atención, ármese de valor y dígale firmemente: "Ahora yo tengo que.... y tu vas a jugar con....." Seguramente llorará y protestará....déjelo, no le preste atención por unos minutos.... y Ud. trate de ocuparse haciendo lo que se propuso. No lo deje llorar demasiado.... recuerde que esto es un ejercicio que tendrá que repetir durante cierto período. En todos los otros momentos que Ud. esté con su hijo, fíjese si su hijo se entretiene solo (que seguramente lo hace estando Ud. presente), ¡elógie la manera como se está entreteniendo! Elógielo cada vez que lo vea haciendo algo que demuestre cierta independencia, dígale lo orgulloso/a que se siente Ud. cuando él hace tal cosa. Cuando sienta que es el momento oportuno para probar otra vez, hágalo. Y el resto del tiempo siga con los elogios cada vez que Ud. se fija que se entretiene solo. Eventualmente logrará que su hijo desarrolle la confianza para funcionar más independientemente y respete y coopere con la necesidad de sus padres de involucrarse en alguna actividad que no lo incluya a él.

2. Conducta: Rechazo a las normas impuestas por los padres:

Meta equivocada del niño: "Les voy a demostrar que yo puedo más que ellos."
Esta conducta puede aparecer en el período de la niñez después de los 4 años. En esta situación el niño se opone a la disciplina impuesta por sus padres, piensa que sus padres no lo toman en cuenta, que no lo entienden, que son injustos y hasta crueles con él; él se enfrenta a sus padres y se pelea con ellos.
Eliminar esta conducta es relativamente fácil. Pero tenemos que trabajar sobre nosotros mismos primero, específicamente, sobre nuestro manejo de la autoridad.
En nuestra cultura latinoamericana tendemos a imponer la disciplina. Nosotros, como padres, sentimos que tenemos TODA la responsabilidad de la crianza de nuestros hijos, y muy a menudo solemos criarlos mandando, imponiendo y esperamos que ellos nos obedezcan. Si no nos obedecen, es muy probable que los castiguemos. Dentro de esta perspectiva, la responsabilidad, el conocimiento, la autoridad, las decisiones, el control, en fin, todo, se centraliza en nosotros. Y, ellos, nuestros hijos, lo que tienen que hacer es obedecernos.
Los voy a invitar a considerar otra manera de manejar la autoridad en casa. Esta "otra manera" implica compartir un poco el poder de la autoridad con su hijo, buscar su cooperación, escuchar su punto de vista, negociar con él una solución. Les sugiero que se acerquen a su hijo o hija y díganle que LOS DOS o LOS TRES tienen un problema que solucionar. Escojan un momento en el cual todos tengan tiempo. Empiecen diciéndole que lo quieren mucho, acompañado de un buen abrazo, y presenten la situación que normalmente explota en una pelea entre Uds. (como por ejemplo, no se acuesta a la hora establecida, o no recoge su ropa, o ve más televisión de lo establecido, etc...) Díganle que quieren solucionar esto, explíquenle el porqué, según Uds., de la hora adecuada para acostarse, o del límite de horas para ver televisión, etc. y pregúntenle que piensa él de la situación. Al principio, es posible que se quede mudo, porqué va a estar muy sorprendido que se le esté pidiendo su opinión. Ayúdenlo, denle confianza, transmítanle que lo que están haciendo va en serio, que lo quieren escuchar y que su opinión vale. Luego, pregúntenle cual sería la solución al problema según él. Al final negocien la norma y encuentren una solución satisfactoria para todos. Sugiero que también discutan las consecuencias de no cumplir con la norma y escojan un día para revisar como está funcionando la norma. Y luego déjenlo asumir su responsabilidad. Transmítanle la confianza que sienten en él. Piensen que él sí va a lograr asumir su responsabilidad.
Una de las grandes recompensas de este método es que le están enseñando a sus hijos a opinar en grupo y a participar en una toma de decisión.
Otra gran recompensa es el haberse ganado la cooperación de su hijo. El ahora es responsable del cumplimiento de una norma aprobada por él y Uds. Ya Uds. no son los únicos guardianes del orden, la responsabilidad es compartida.
Según Rudolf Dreikurs el niño que no se siente querido en su familia va a intentar ubicarse o a construirse una identidad en el seno familiar en base a metas equivocadas. Según Dreikurs existen cuatro metas equivocadas. En el capitulo anterior revisamos dos de las metas y en este capítulo vamos a examinar las dos metas restantes. El conocimiento de estas metas nos pueden ayudar a comprender lo que le está ocurriendo a un niño en conflicto y nos pueden ayudar a encontrar una solución.

3. Conducta: Agresión y venganza:

Meta equivocada del niño: "No me quieren, solo me castigan. Pues ya verán, me vengaré. Les voy a hacer daño."
Esta conducta surge de la intensificación de la lucha por el poder (Ver el artículo 3). Cuando padre e hijo se encuentran progresivamente complicados en esa lucha y quieren, cada uno, doblegar al otro, fácilmente se puede pasar a la venganza. En esta etapa el niño busca hacerle daño a sus padres. Busca maneras de herirlos, como él se siente herido por ellos. Puede ser que agreda a sus hermanos menores, o que robe y/o destroze pertenencias favoritas de sus padres.
Esta es una situación muy difícil de manejar porqué los padres se sienten profundamente heridos por los actos del niño y la frustración y rabia que sienten al no poder controlar la situación hace que deseen responder castigándolo aún más fuertemente, o sea, causarle más daño al hijo. No obstante si los padres optan por el castigo ellos están reforzando el mensaje al hijo de que es MALO y esto va a causar más rebeldía en el hijo y aumentará su sentimiento de venganza.
¿Qué hacer?
Ante todo, no reaccionen agresivamente en contra del niño, tómense unos minutos para analizar la situación y para ROMPER EL CICLO DE VIOLENCIA.
Para que la violencia desaparezca de la conducta del niño, tiene que desaparecer antes de la conducta de los padres.
Recapitulando, los padres tienen que comenzar por darse cuenta de que están enfrascados en un ciclo de violencia con su hijo. Luego tienen que tomar la decisión que quieren salirse de esa situación y quieren ayudar a su hijo.
Para ayudar a su hijo tienen, ante todo, que revisarse y preguntarse si lo quieren y piensen en las cosas que les gusta de él. Si están todavía llenos de rabia, traten de aislar ese sentimiento y piensen en tiempos anteriores cuando no había tanta violencia y piensen en como era él antes y rasgos de su personalidad que les gustaba entonces.
Para que el cambio se pueda efectuar con éxito es muy importante que exista amor de Uds. hacia él.
El siguiente paso es convencerlo que Uds. sí lo quieren y que desean propiciar un cambio entre Uds. y él.
Podrían empezar por preguntarle: "¿Es que haces (tal cosa) porque estás lleno de rabia?" "¿Es que piensas que hemos sido injustos contigo y nos quieres castigar haciéndonos daño?" "¿Es que piensas que no te queremos?"
A través de estas preguntas Uds le están diciendo que saben que él está lleno de rabia hacia Uds; que él piensa que Uds. son injustos y que por eso se quiere vengar; y que él piensa que Uds. no lo quieren. O sea, que saben lo que le está pasando internamente.
Ojalá se sienta con la libertad de poder contestar y empezar un diálogo. Es posible que les tenga mucha desconfianza y no se sienta en condiciones de hablar. Si no contesta, no importa. Lo importante es que Uds. le comuniquen que lo comprenden y que saben lo que le está pasando.
Después, díganle que lo quieren, sin plantear condiciones. (Pero, por favor, ¡no le digan que lo castigan por qué lo quieren!)
Díganle entonces que todos, Uds. y él, necesitan cambiar. Procedan poco a poco. No aspiren a mucho al principio. Busquen un aspecto conflictivo que sea de fácil solución, de manera que puedan tener éxito cuando lo emprendan.
Otro aspecto importante es tratar de alentarlo lo más posible y transmitirle que lo está haciendo bien y que están orgullosos de él.

4. Conducta: Desaliento:

Meta equivocada del niño: "No sirvo. Es mejor que no intente nada porqué todo me sale mal."
En esta etapa el niño está profundamente desalentado porqué está convencido que no lo quieren, que no están interesados en él, porque él no es capaz de hacer nada bien o, por lo menos, de hacer algo que a merite la aprobación de sus padres.
Cuando un niño que tenía un buen nivel de energía se vuelve muy tranquilo, poco bullicioso y poco participativo y este niño no está enfermo físicamente; cuando el niño no responde a intentos o estímulos para ayudarlo a salir de donde está, esta es una indicación que el niño y sus padres necesitan ayuda profesional.
En este caso estos padres necesitan revisarse, con la ayuda de un profesional, y comprender que ha significado este niño para ellos hasta este momento. Los padres necesitan darse cuenta de que este es un niño que vale, que es importante. Lo importante es poder cambiar la dinámica familiar para que el niño pueda sentirse querido y útil en la familia y así aumentar su autoestima.